domingo, 21 de febrero de 2010

"El juego de la vida"

Salió de su casa con una buena vibra, hoy sería una noche diferente. Iba con su mejor ropa: traje negro de marca, una corbata color turquesa, camisa blanca y un sombrero que combinaba.

Eran las 8 p.m. cuando salió de casa y ya se sentía el dueño del mundo. Primera parada el casino, Black Jack, póker y ruleta eran el menú de la noche. En la primera tanda perdió 2 de los $3,000 que lo acompañaban, se cambió de mesa, la ruleta no nos fallaría, $500 más de apuesta perdida. Es tiempo del póker.

En la primera ronda la cosa no iba bien, solo tenía un par de 6 y el retador duplicaba la apuesta, era mucho más del saldo que tenía disponible. Aun así aceptó el reto.Era todo o nada.

El tiempo parecía detenerse, respiro profundo y pidió 3 cartas mas. La primera fue un 5, mal augurio, la siguiente 6 y la última...6!! La suerte al fin le había sonreído. Póker!!

Recuperó de una sola mano lo que había perdido, en las siguientes juegos el saldo lo duplicó, luego los triplicó, al terminar la sesión de póker llevaba $35,000 y la noche aun era joven.

Uno amigos espontáneos, de esos que siempre huelen el dinero nuevo, lo invitaron a una fiesta, ya sabes tragos, mujeres… fiesta, la noche pintaba bien.

Contrató una limosina, para llegar con estilo, cambio su camisa blanca por una negra más casual, mandó a volar la corbata, se quito el sombrero de tela y acomodó su abundante cabellera por un estilo de peinado más moderno.

Llegó a la fiesta, un par de roncitos para abrir el apetito, unas boquitas, risas,excesos un par de bailaditas con la amiga de alguien, y de repente...

Ella apareció, alta rubia, hermosa, lo vio de reojo y le sonrió, era la joya de la corona para una noche como esta. Un par de tequilas después no pudo resistirse a sus encantos, se desabrochó los primeros botones de su camisa negra, se acercó y le dijo la frase más genial que un tipo como él podría decirle…”La ciudad está llena de sapos, pero cada princesa puede descubrir a su príncipe encantado, rompiendo el hechizo con un beso, siempre he creído que soy un príncipe, pero esta es tu oportunidad de besar un sapo que habla”.
Ella puso cara entre confusión y admiración, le dio risa, comenzaron a hablar y la química invadió el ambiente.

Unos tragos después, 4 canciones salsa y el roce de los cuerpos comenzó un incendio, era momento de buscar un lugar más cómodo. Salieron del lugar y sellaron el trato con un beso…hasta que...

Un tipo delgado, mal encarado, parecía nervioso apuntando con su pistola en el estómago le pidió amablemente la cartera. Ella se quedó congelada, el sabia que tenía $35,000 en su billetera así que no la dejaría ir así de fácil, no sin pelear por ella.

Tomó un segundo y analizó la situación, vio que tenía una mano vendada y muestras de golpes en la cara, lo más seguro es que en el cuerpo también, tomó aire y con una llave de karate le fracturó la mano. Tiró la pistola por la alcantarilla, le dió una pata entre las piernas asi que el ladrón no pudo correr, estaba a su merced, no solo sería un héroe para la chica, si no que sacaría todo su estrés acumulado entre el trabajo, el desamor, las confusiones de la vida, el estrés y la aparente mala suerte que le había embargado durante meses. Lo iba a moler a palos.

Tomó al tipo y le dio una lección que jamás podrá olvidar, entre golpe y golpe parecía que se escuchaba música clásica. Fue un momento sublime.
Lo dejó ir cuando ya era un montón de sangre y lágrimas…

Aun la noche era joven y la chica lo esperaba, más excitada que nunca, tomó su limosina hacia el mejor hotel de la ciudad, alquiló la mejor suite, que tenía una gran vista de la ciudad, un tv de 50” jacuzzi, sala, comedor , tina y una enorme cama…

Para que más detalles, la puerta la cerró ella con una sonrisa pícara…

Y fue entonces que empezaron a salir los créditos de aquel juego de WII que esa noche de viernes había “topado” aquel hombre en calzoncillos, calvo, cuarentón,soltero y sin amigos, sin más aspiraciones que ir nuevamente a la tienda a alquilar otro juego para “topar” la siguiente noche.

Miró a su alrededor y estaba solo, no pudo celebrar con nadie que había llegado hasta el final del aquel juego llamado “El juego de la vida” version 2.0 para WII.

Se sintió derrotado al saber que la ficción había terminado y que tenía que volver a jugar el juego en donde infelizmente él era el único protagonista, el juego de la vida real, su juego diario el que estaba harto de jugar: “life sucks”

3 comentarios:

Anónimo dijo...

... es lo que nos sucede cuando dejamos de soñar en lo que queremos lograr!

Mejor vivamos la vida con el próposito que esa ficción se haga realidad!!!

AV

Ana dijo...

Se nota que estas pegado con el WII. Muy bueno.

Anónimo dijo...

Y cuando vamos a tener el próximo blog??????

AV